Todos tenemos diferentes razones por las cuales nos volvemos adictos a éste juego; puede ser la competitividad o entrar a jugar con amigos o familiares y tratar de encontrarse en divisiones más altas y otras muchas razones. Pero hay algo que todos tenemos en común y es lo que más influye para que todos terminemos viciándonos en este gran juego y este es obviamente nuestro amor y pasión  por el futbol. Aquí está el punto más importante para poder entender nuestro vicio por managerzone y es el sueño frustrado que todos tenemos de ser futbolista, técnico o cualquier cosa que esté relacionado con este amado deporte. Esto se explica porque roza con esa fibra sensible de nuestro pasado donde están nuestros sueños infantiles guardados pero aunque no lo queramos siempre termina saliendo. Es por esto que nuestro querido managerzone nos aprisiona y nos obliga a estar siempre conectado y atento al juego, porque todos los que crecimos viendo los súper campeones siempre quisimos vivir una historia como la de Oliver Atom.

En esta columna trataremos la relación del manager con el mundo real dentro de la vida del usuario y como poco a poco comienza a cambiar nuestra percepción de todo (si de todo) y es por esto que esta columna se llama con la pelota entre ceja y ceja, porque al final es así como terminamos por nuestra obsesión por este juego.

Pasado un tiempo desde que comenzamos el juego,  cuando aprendemos más o menos para que sirve cada pelota y dejamos de hacer errores estúpidos como poner de delanteros a los jugadores que más tienen entradas porque según tu brillante idea estos encaran más porque “entran más al arco” (pueden burlarse de mí, yo fui el idiota que cuando comenzó tuvo esa brillante idea). Después de reestructurar tú equipo en razón de estos nuevos conocimientos, lo segundo que todos pensamos es como sería yo si fuera un jugador de manager y ahora voy a hacer mi jugador de manager de acuerdo a mis habilidades personales (obviamente este va a quedar mucho mejor de lo que debería ser tengo que tirarme flores).

Velocidad: No soy conocido por ser el weón más rápido pero tampoco por ser el más lento por eso creo que con unos cuadrados 8 de velocidad está bien, aunque en este último tiempo he perdido pique.

Resistencia: siempre me canso rápido, pero últimamente he estado tratando de mejorar y como hace poco pude comprobar que mejoré un poquito corriendo en el running de la U y en los 10k me demoré 1 hora, por eso creo que con 5 y mejorando quedará bien

Inteligencia: un desastre, 4

Pases cortos: a veces bien a veces mal, 6

Remates: con unos 8 pero bajando

Cabeza: no soy tan bueno pero como soy alto me puedo aprovechar de eso, 5

Atajando: últimamente he jugado arto al arco (si, van a decir el weón al arco) y soy más o  menos, 9

Control: soy un tronco, 4

Entradas: es mi mayor habilidad en el futbol, 9

Pases largos: era bueno pa mandarla a la galucha, 7

Balón parado: aunque nunca me dejaron patear los tiros libres siempre me consideré bueno, 6